El entorno y los genes: ¿somos dueños de nuestra percepción del mundo?
Tengo ante mí una mujer embarazada. La miro y me llena de ternura. Me emocionan la esperanza, la ilusión y el amor que irradia. Imagino esa nueva vida latiendo en su interior. También los asombrosos cambios y modificaciones que se están produciendo a cada momento y que permiten ese prodigio que es la gestación. Pero,